Padres asumen los costos, Altos precios de gas afectan a las escuelas

» Además de los centros educativos, los comedores de caridad se verán en aprietos para cocinar alimentos a los indigentes
los centros escolares no tienen recursos para asumir el nuevo precio del tambo de gas y cocinar los alimentos de los estudiantes. FOTO EDH / ARCHIVO


Karla Argueta Miércoles, 6 de Abril de 2011
EDH

El nuevo precio del gas licuado ha comenzado a perjudicar a las escuelas públicas, así como a los comedores de caridad; y, además, se convertirá en una de las críticas más fuertes que harán organizaciones aliadas al FMLN, durante las protestas del Día Internacional del Trabajo, el 1 de mayo.

Niños, padres de familia, ancianos e indigentes podrían verse afectados por el nuevo sistema del subsidio al gas si el Ministerio de Economía no incluye a los centros escolares nacionales y a los comedores de caridad como beneficiarios de la racionalización del subsidio.

De acuerdo con el secretario del Sindicato de Maestros de El Salvador (Simes), Edgardo Guidos, cada centro escolar gasta al menos cuatro cilindros de gas de 25 libras mensualmente para poder proporcionarle refrigerio y almuerzo a 1 millón 326 mil alumnos de parvularia y educación básica de todo el país.

Guidos aseguró que debido al alza en el precio del gas, muchos padres de familia se verán obligados a incrementar la colaboración que dan a los centros escolares para mantener con vida el programa de alimentación, debido a que el Mined solo les proporciona el arroz, los frijoles y el maíz, mientras que el resto de insumos para cocinar corre por cuenta de los mismos beneficiarios.

Mientras las escuelas se las ingenian para absorber los $14.68 que hoy cuesta el tambo de gas de 25 libras, organizaciones civiles han comenzado a criticar desde ya la racionalización del subsidio, y han advertido que la iniciativa será una de sus quejas el próximo 1 de mayo (ver siguiente nota).

SIN RESPUESTAS

"En las escuelas en que yo me muevo como dirigente magisterial y en donde yo trabajo no he observado que el Ministerio de Economía haya llegado a proponer cuál es la forma viable para garantizar que todas las escuelas en donde se utiliza gas van a tener subsidio", sostuvo Mario López, dirigente de Bases Magisteriales.

López aseguró que el problema fue expuesto hace un mes al ministro de Educación, Salvador Sánchez Cerén; sin embargo, hasta la fecha no hay una respuesta concreta, y a pesar de que los recursos para que los centros educativos cubran sus necesidades básicas ya son escasos, la cartera aprobó recientemente un recorte presupuestario del 10%.

Según el dirigente de Bases Magisteriales, las autoridades argumentaron la reducción de fondos, debido a de que los maestros recibirían un incremento salarial.

"Eso deja a las escuelas y, en especial, a los padres de familia en una situación peor", subrayó, López.

De acuerdo con ambos profesores, cada jefe de hogar aporta al menos $1 por mes al fondo de la escuela.

Guidos agregó que con el nuevo programa "Vaso de Leche" el uso del gas incrementará, porque tendrán que hervir el líquido antes de servirlo a los estudiantes. Con ese plan, el Mined pretende beneficiar a 247 mil alumnos de 532 centros educativos durante este año.

El problema se extienda hasta las escuelas de la zona rural, según Manuel Molina, del Sindicato de Educadores del Programa Educo (Simeduco).

"Lo que se nos ha dicho es que se está trabajando en una medida para que las escuelas gocen de subsidio, pero, por el momento, es bastante complicado, porque se está asumiendo el costo triplicado del tambo de gas", enfatizó Molina.

El maestro detalló que en el campo hay unos mil 800 centros escolares, y de éstos el 30 por ciento utiliza gas, mientras que el resto, leña.

En el Centro Escolar Cantón San Francisco, de San Pedro Perulapán, donde trabaja Molina, solo utilizan la plancha de la escuela para hacer pupusas tres días a la semana, por lo que al mes gastan unos tres cilindros de gas, dijo.

Aunque el costo del tambo está incluido dentro del presupuesto escolar, el representante de Simeduco explicó que probablemente deberán hacer reajustes en la partida o recortar otros gastos para cubrir el costo del gas.

La otra consecuencia temida es que aumente el consumo de leña para cocinar. Molina opina que muchas escuelas rurales podrían volver al método si no son incluidas en el subsidio.

La oficina de Comunicaciones del Mined informó que el tema está en manos del Ministerio de Economía y la Asamblea Legislativa, porque Educación ya había expuesto el problema y solicitado la inclusión de los centros escolares, así como se pensaba hacer con los comedores.

Alejandro Solano, jefe de técnicos de la Asamblea, explicó que si el Minec así lo estipula las escuelas podrían ser subsidiadas si son tomadas en cuenta bajo la figura de "negocios de subsistencia", que incluye la reforma al artículo 9-A de la ley reguladora del gas licuado.

caridad en aprietos

El comedor para ancianos "Mamá Margarita", administrado por la parroquia Don Rúa, en San Salvador, podría ser otro de los sitios afectados con el aumento en el precio del gas.

En este se alimentan 150 ancianos a diario durante el desayuno y el almuerzo. Según su directora, Angelita de Guerrero, se consumen cinco tambos de 100 libras y cuatro de 25 mensualmente para cocinar los alimentos de los adultos mayores.

El presupuesto del comedor para compra de gas son $123, y con los nuevos precios alcanzará para la mitad de lo requerido.