(Tomado de El Diario de Hoy, menos el título y la foto)
Ayer los que iniciaron la
jornada de protestas fueron los profesores y dirigentes de las gremiales
Simeduco, Siandes 21 de Junio, Sedesa, Atramec y Agepym, quienes a eso de las
4:00 de la mañana se apostaron frente al portón principal de la departamental de
Educación de San Salvador para evitar el ingreso de los empleados.
En el caso de estas gremiales
no sólo expresaron su rechazo en el tema de incremento al costo de la energía
eléctrica sino también demandaron que los titulares de Educación tomen en serio
la discusión de varios temas que han sido puestos en la mesa de negociación,
entre ellos es el incremento salarial.
“Lamentamos que el Ministro de
Educación (Carlos Canjura) el 1 de julio, en la mesa de negociación, no haya
querido hablar del tema. Lo único que dijo es que no se comprometía con montos
para no hacer el ridículo que hizo en 2014 cuando nos ofreció el 50 % de
incremento”, señaló Francisco Zelada, secretario general del Simeduco.
Zelada pidió a las autoridades
que se instale una mesa en la que no se imponga la agenda del gobierno, sino
que realmente se tome en cuenta la propuesta de las gremiales.
Durante el cierre del acceso a
la departamental de Educación, los del Simeduco también demandaron que a los
maestros que se retiraron de forma voluntaria, bajo el decreto 242, se les
cancele la segunda parte de la compensación económica establecida en dicha
normativa. El pago, según indicó Zelada, tenía que haberse concretado en junio
pasado.
Por su parte, el director de la
departamental de Educación, José Augusto Hernández González, cuestionó el
cierre de las instalaciones. Señaló que no sólo se afectó a los cerca de 100
empleados que laboran allí, sino también a las personas que llegan a realizar
distintas diligencias.
“Entre 200 y 300 personas a
diario visitan la departamental para una serie de trámites, entre maestros, padres
de familia, alumnos, proveedores de servicios, incluso de otras instituciones
que vienen a coordinar esfuerzos de trabajo”, añadió Hernández González.
El funcionario aseguró que no
hay razón para que se dé el cierre de la institución cuando hay una mesa en
donde están negociando y pueden expresar demandas y solicitar que les solventen
necesidades.
“No hay razón para esto, salvo
otros deseos de proyecciones personales”, advirtió el director de la
departamental de Educación.Esta última medida fue levantada a las once de la
mañana, cuando por la intervención de personeros de la Procuraduría para la
Defensa de los Derechos Humanos, se logró establecer una reunión entre el
Ministro de Educación y las mencionadas gremiales el lunes próximo, por la
tarde.
Otro lugar donde se dio una
protesta fue en el Registro Nacional de Personas Naturales (RNPN). En esa
institución los empleados están inconformes con la directora porque según
explican está violentando sus derechos laborales y los ha acusado de ser desestabilizadores.
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